El filtro de partículas, también conocido como FDP, es parte del conjunto de filtros del vehículo. Su finalidad es filtrar las partículas contaminantes liberadas durante la combustión por el motor, incluso antes de que salgan por el escape.
Presente principalmente en los motores diésel, el filtro de partículas también se instala en los vehículos de gasolina desde 2016. Está ubicado después de la salida del motor, en la línea de escape del vehículo.
Casi el 99 % de las partículas contaminantes son filtradas por el FDP. Son necesarios dos pasos para garantizar el correcto funcionamiento del filtro de partículas:
Fase 1: filtración o recogida de partículas
El filtro de partículas, durante esta fase, recogerá las emisiones contaminantes producidas por el motor. Las partículas almacenadas en el filtro crearán una capa de hollín, llamada calamina. Esta última afectará y reducirá el rendimiento del motor.
Fase 2: la regeneración
El segundo paso superará este problema con la regeneración. Se eliminan los depósitos de hollín acumulados durante la filtración, es una especie de limpieza automática del filtro de partículas.
La temperatura de su línea de escape aumenta bajo la acción del motor, esto permite que las partículas se quemen de forma natural. Los sensores colocados en los extremos del filtro detectan si el filtro está obstruido, sucio u taponado.
Gracias a estos sensores, el motor es informado del estado del filtro y eleva la temperatura de los gases de escape para eliminar las partículas. Entonces puede comenzar un nuevo ciclo.
También puede utilizar un aditivo en el combustible para disminuir la temperatura a la que se queman las partículas. Debido a esto, la combustión tendrá un ciclo más corto. Sin embargo, no olvide rellenar el aditivo regularmente.
Algunas señales le dan una idea del estado de su filtro de partículas:
El filtro de partículas, que en un principio dura toda la vida útil del vehículo, puede desgastarse según la frecuencia de los trayectos, los hábitos de conducción, el entorno, etc.
Una acumulación de calamina obstruye el filtro de partículas a fuerza de funcionar. Si no conduce el tiempo suficiente, especialmente en la carretera, el hollín no se quemará y obstruirá su filtro. Para limpiarlo, es necesario realizar una descarbonización o conducir a alta velocidad, con un aditivo especial.